
Facundo Campazzo tuvo otra gran noche y fue determinante en la victoria de Denver.
Al ritmo del base argentino Facundo Campazzo, quien volvió a dar sobradas muestras de toda su categoría, Denver Nuggets superó por
Nuevamente titular y clave con su reingreso en el último cuarto cuando el trámite estaba igualado 91-91, el base cordobés tuvo otra noche a puro brillo en la ciudad de Oregón y estuvo muy cerca de firmar el triple-doble, una cifra que ningún otro cordobés había logrado en la mejor Liga del mundo: en 32 minutos de acción, se despachó con 11 puntos, ocho rebotes, ocho asistencias, dos robos, un bloqueo y tres pérdidas.
Más allá de los números de su planilla, el N°7 también fue un dolor de cabeza en la zona defensiva y hasta se sacó chispas con la figura del local, Damian Lillard, y con el gigante Jusuf Nurkic. Como una mosca, se pegó a los adversarios, no los dejó moverse ni probar al aro. Otro de los que tuvo una noche destellante fue Nikola Jokic, con 36 puntos, 11 rebotes y 5 asistencias.
Con este triunfo en casa de Portland Trail Blazers, Denver Nuggets lidera 2-1 la serie de los playoffs de la NBA y buscará estirar la ventaja el próximo sábado, desde las 17 (hora argentina), cuando se desarrolle el cuarto juego, otra vez en el Moda Center.
Luego del partido y la victoria como visitante, Campazzo se acercó a los micrófonos de la prensa y declaró: “Juego así desde que era niño en Córdoba. Jugaba de la misma manera con mis compañeros. Ahí todos éramos realmente bajitos, ja”. Y remató: “Creo que mi ADN, la forma en la que siento el básquet, viene de cuando era niño”.