Columna de opinión: Beatriz Montaldo

Pensar otras formas de lucha

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848

Por Beatriz Montaldo (*)

Este es un momento sumamente complejo. Tengo el convencimiento de que la negociación en paritarias es clave para seguir avanzando, pero para nada implica ceder en las conquistas.

Estamos careciendo de una negociación y eso es responsabilidad tanto de AGMER como del gobierno provincial, que nos lleva a pensar que la palabra con el otro es innegociable, donde el interlocutor queda totalmente anulado y con incapacidad de llevar adelante un proyecto en común. El de los descuentos por días de paro termina siendo el eje principal de esta lucha, un tema que se desprendió de la lucha histórica por mejores condiciones laborales. Entonces, tenemos que buscar una forma de destrabar el conflicto y también el gobierno tiene que ofrecer una respuesta en la cual se permita una negociación, y llevar adelante un proceso donde la confrontación puede seguir acompañándolo pero no tiene que ser el único elemento. Hay que tener en cuenta que esto va llevando también a un deterioro de la escuela pública, donde la falta de días de clase impacta de modo importante en los sectores más vulnerables de la sociedad.

Quien no produce en el sindicato una negociación como forma de llevar adelante un conflicto, equivoca el camino porque obviamente nos pone en una situación unilateral, donde una de las partes queda anulada. Los ejes de una paritaria tienen que girar en torno a la recuperación del salario real, conjuntamente con la devolución de los días de paro, pero además hay que seguir defendiendo la escuela pública. La recomposición salarial es fundamental para que desarrollemos nuestro trabajo, pero también tenemos que discutir condiciones laborales, de asistencia al lugar de enseñanza de los chicos, la limpieza, la situación de los comedores escolares; en una paritaria tienen que entrar ejes que también hace al buen funcionamiento de la escuela pública y las condiciones de los trabajadores.

Hay que buscar una forma de salir de esta encerrona, porque está demostrado que un mayor número de días de paro no significa mayor posibilidad de resolución del conflicto. Todos somos conscientes de que esto ha llevado a un desgaste de la medida de fuerza fundamental en los trabajadores, que es la huelga.

(*) Ex secretaria general de AGMER.

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