Dura encuesta sobre el Poder Judicial

Cuando no se hacen bien los deberes

Edición
873

Luis María Serroels
(Especial para ANALISIS)

La existencia de resquemores para con el Poder Judicial en el ámbito de los abogados no es cosa nueva y, quiérase o no y como reza un viejo dicho, cada uno habla de la feria según como le fue en ella. Pero enfrentarse con un juicio adverso de semejante magnitud de parte de quienes acercan el derecho a la justicia en busca de respuestas que le den a cada uno lo suyo, sujetándose a la Constitución y las leyes que la reglamentan, seguramente no ha estado ni en los cálculos más pesimistas de los destinatarios.

Tampoco son nuevos los reclamos que institucionalmente se han formulado desde esta Seccional a través de la conducción central de la provincia, para que se los remitan al STJ, aunque también han sido expuestos públicamente. No sólo se alude a la elección antidemocrática de jueces y secretarios que han desvalorizado el servicio “a un grado tal de carecer de estabilidad y seguridad jurídica”, sino que se consigna como inconveniente que atenta contra el buen desempeño la “morosidad judicial”, algo de lo cual la sociedad tiene acabado conocimiento.

La encuesta es amplia y no deja de lado la opinión puntual sobre determinados juzgados, aunque respecto del foro Penal y Correccional, un 80 por ciento optó por no opinar. Pero en resumen, el concepto resulta claramente negativo para el funcionamiento tribunalicio, no omitiéndose aspectos tales como la falta de unificación de criterios jurídicos y el defectuoso desenvolvimiento de los magistrados y falta de designación de jueces y secretarios titulares.

El trabajo es extenso pero hasta aquí sus principales aspectos. Hágase la salvedad de que no se puede englobar a todos los agentes del Poder Judicial en los juicios adversos exhibidos por la encuesta, atendiendo al esfuerzo y la responsabilidad que sin dudas muchos vuelcan en su quehacer diario. Por ello sería equivocado que unos queden enredados en los errores que otros cometen.

De hecho que esta encuesta sirve como disparador para refrescar un poco ciertos hechos que no contribuyen a enaltecer el desempeño que se aguarda del Poder Judicial. La designación mediante resolución del STJ de jueces suplentes que no puedan quizás acreditar suficiente idoneidad por no haber pasado por el tamiz del Consejo de la Magistratura, es un motivo razonable de preocupación. Pero en los últimos años se han venido registrando situaciones que el ciudadano de a pie no acepta y que lo lleva a legítimas aprensiones que rodean de desconfianza la actividad judicial.

(Más información en la edición gráfica de ANALISIS de esta semana)

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