Los engranajes de la represión

Martín Gerlo
Cuando a Jaime Dri –quien declaró a través de videoconferencia desde Panamá- se le preguntó si conocía a alguno de los imputados, logró identificarlos por los seudónimos con que se encubrían cuando realizaban las tareas represivas de la cual fue víctima: “Sí, conozco a Jorge (Pascual Oscar Guerrieri), Sebastián (Jorge Fariña), Daniel (Juan Amelong) y Sergio II (Walter Pagano)”, afirmó. Nunca más pudo olvidarse de esos nombres, ineludibles símbolos del horror, y hasta el final de su relato interpeló a los represores a través de ellos.
“Una vez desencadenados los hechos de la denuncia de la Operación México (a través de la cual se pretendía que Tulio Tucho Valenzuela entregue a la Conducción Nacional de Montoneros, radicada allí) fuimos a la Escuela de Magnasco y luego a La Intermedia. Allí hablé con María –como se hacía llamar Raquel Negro-. En realidad el último lugar en el que ella estuvo (antes de ser trasladada a Paraná) no fue la Quinta de Funes, sino La Intermedia”, remarcó, contrariamente a lo que se creía, al ser interrogado por el fiscal José Ignacio Candioti. El testigo reveló que Negro ya había viajado en una oportunidad a la capital entrerriana, para hacerse un chequeo médico por su embarazo. Cuando ella regresó, “Jorge (Guerrieri) nos reunió a los prisioneros. A María le comentan que nuevamente la llevarían a Paraná. ‘Esto está raro’, me dijo. ‘Bueno, vaya a saber’, le respondí para tranquilizarla. La llevaron una mañana, muy temprano”, puntualizó.
Esa fue la última vez que Dri vio a Raquel Negro. Semanas más tarde supo del nacimiento de sus hijos: “Este hijo de puta de Tucho encima tiene mellizos”, recordó que había dicho alguien. Luego fue trasladado a la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA) y a un centro clandestino de detención llamado La Pecera, del cual logró fugarse en junio de 1978. Valenzuela había partido antes hacia México, y desde entonces tampoco volvió a verlo: “Tenía muchas esperanzas de que se fugue. Le di un gran abrazo y le dije: ‘Fuerza Tucho’”, relató.
Junto al padre biológico de Sabrina, según contó, marcharon “Nacho, Sebastián y Daniel”. Amelong no lo negó. Fariña, quien amplió su declaración este miércoles, se limitó a decir que no pudo haber hecho un pacto de silencio sobre algo que no sabía y en lo que no tuvo participación.
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