“Me genera mucha satisfacción que los jóvenes se puedan desarrollar en el ámbito rural”

Soledad Comisso
–¿Dónde nació?–¿Entonces toda la vida vivió en el campo?
–Viví en el campo desde la infancia, fui a la primaria en la colonia y a los 12 años mis padres me enviaron a la secundaria en Rosario del Tala. Optaron por mandarme a una escuela técnica, donde estaba internado, que quedaba a 80 kilómetros de mi casa. Recuerdo que muchas veces, cuando llovía, tenía que irme a la casa de otro tío que me prestaba un caballo para volverme hasta mi casa. Después, el domingo, me volvía también a caballo desde el campo hasta su casa y ahí me tomaba el tren para ir a la escuela el lunes.
–¿Cómo fue la experiencia de estar en un internado?
–Fue una experiencia dura, pero mis padres no tenían ni la primaria hecha y entonces para ellos no existía la opción de no tener la secundaria completa para sus hijos. Se esforzaron para que sus cinco hijos estudiaran e hicieran sus carreras.
–¿Todavía sigue teniendo el campo de sus padres? ¿Lo trabaja?
–Tenemos el campo con mis hermanos, son 100 hectáreas, y hoy está arrendado. Nosotros no lo trabajamos, porque se nos complicaría mucho. Somos cinco hermanos, de los cuales dos viven en Neuquén, dos vivimos en Paraná y una hermana en Herrera. La posibilidad de armar un esquema de producción con tan pocas hectáreas no sería rentable, entonces se lo arrendamos a unos vecinos que lo trabajan.
(más información en la edición gráfica de ANALISIS del jueves 27 de noviembre de 2014)