¡Teléfono en la redacción! El eterno retorno (1)

Entre Ríos, todos los bardos: The Fracking Dead

Edición
1041

Por A.S.

—¡Hola, paisano…! Qué bueno escuchar otra vez su voz.
—¿Qué cuenta? ¿Cómo anda? ¿Qué es de su vida? ¿Cómo dice que le va?
—Calculo que como usté´, no muy diferente.
—Aquí ando, asombrándome por la vida. ¿No le pasa lo mismo?
—Náh. Yo perdí mi capacidad de asombro en los últimos años, nada me sorprende a esta altura. Ni tampoco me altera demasiado.
—Ah, eso es muy malo para la salud mental. Es bueno mantener la curiosidad y dejarse sorprender por los sucesos. Si no, nos convertimos en muertos en vida.
—Como los Walking Dead.
—¿Los Fracking Dead? Ni idea, yo de rock no entiendo demasiado.
—Qué rock ni rock. Y no es Fracking Dead, es The Walking Dead, la serie esa, tan exitosa. La de los zombies, los muertos vivos.
—Ahhh… Sí, sí, ahora le entendí. Pero dígame, ¿cómo no se va a sorprender con las cosas que pasan? Con eso del fracking, ya que estamos. ¿No le parece genial que la Legislatura lo prohíba? Creo que somos la primera provincia del país que prohibirá el fracking. ¡Un ejemplo ambiental para toda la Patria!
—Me está jodiendo, ¿no?
—Para nada, ¿por qué lo dice?
—¿Prohibimos el fracking, que acá no hay? No joda. ¿Por qué no prohibimos el glifosato, que sí hay, y está haciendo estragos? Es una cargada. ¿Ejemplo ambiental? ¿Por qué no empezamos a tratar los efluentes cloacales de las ciudades, que los mandamos crudos a todos los cursos de agua de la provincia? Me imagino que usted sabe que no hay una sola ciudad entrerriana que trate integralmente sus residuos cloacales, ¿no? Y no hablemos de los industriales...
—Bueeeno. Ya veo que usté´ no cambia. Por un lado me alegra, es el de siempre. Pero siempre en contra de todo, che. ¡Acepte una! ¿No decimos siempre que hay que prevenir, que es mejor que curar? Acá no va a haber destrucción de las napas subterráneas por ese método extractivista contaminante. Y eso hay que aplaudirlo.
—Claro. Mientras tanto, vamos llenando de agrotóxicos el aire, los ríos y los arroyos. Es como festejar que el médico nos prohibió tomar whisky mientras chupamos juntos hectolitros de vino berreta mezclado con bencina vieja. Y se lo damos a nuestros gurises en cada comida.

(Más información en la edición gráfica de ANALISIS del jueves 16 de junio de 2016)

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