“Los periodistas quieren tener la mejor nota; yo la mejor imagen”

Claudia Martínez
(Especial para ANÁLISIS)
Hablar con Tito -así es conocido por todos los periodistas- sentado tranquilo en un escritorio, es casi una misión imposible; concertar una charla con él, aún más. No sólo porque no se detiene nunca, sino porque su trabajo en Ceremonial lo lleva a todos lados del país y del mundo. Alberto Rufino Fernández, nacido un 21 de febrero (¡oh casualidad!, en esta oportunidad el mismo día que el actual gobernador Gustavo Bordet) en La Paz, hace 57 años, trata de coordinar al momento de este reportaje la visita del ministro del Interior, Rogelio Frigerio, a la provincia de Entre Ríos.
El teléfono suena, del otro lado está el gobernador y, con lujo de detalles, le cuenta cómo está prevista la agenda del día. Y eso ocurre durante un largo rato. Menos mal que es un día tranquilo…
Tiene tiempo récord en armar valijas. En su casa tiene una preparada, chica, con ropa interior, trajes y camisas y un neceser con cargadores, adaptadores y todo lo necesario para un viaje relámpago. Sale de trabajar y el saco va a la percha. Todo tiene que estar listo y preparado. Tiene todo en todos lados para salir de golpe si es necesario.
Los encargados de Ceremonial de Nación cuentan que en Buenos Aires alguna vez les dijeron: “háganle caso a Tito”. Él es quien organiza la foto y acomoda los protagonistas. Dice que los periodistas “hacen su trabajo. Nuestro objetivo es cuidar al gobernador. Ellos buscan la primicia. Los periodistas no están alejados de nuestro trabajo. Tratamos de conjugar los intereses de ambos”.
Y considera: “Están los ceremoniales de los otros y los nuestros. Tratamos de coordinar todos juntos las actividades”. Enseguida acota algo a su interlocutor en el teléfono: “prepará todo para que nada quede librado al azar”, le dice a otro de los empleados de su Dirección”. Cruce de llamadas, contraordenes, envío de mails. Todo coordinado.
—¿A qué hora empezás tu trabajo?
—Hay días que empieza a las 6.30; hay días que empieza a las 7 o a las 8. Pero también es cierto que anoche eran las 23.45 y estaba hablando con la gente de Cancillería por el viaje a Encarnación, ¿viste?, ultimando los detalles, porque va el Presidente. Es una reunión binacional… te largan la información, avisarle al gobernador.
(Más información en la edición gráfica número 1051 de ANALISIS del jueves 24 de noviembre de 2016)