Entre Ríos, todos los bardos: Macri no pasa las PISA

Por A.S.
—¿Mucho calor por ahí?
—Buen día primero. ¿O dormimos juntos?
—La boca se le haga a un lado. Eso no sucederá jamás.
—No diga nunca que de esa agua no ha de beber. Mire que la gente cambia.
—Ya lo creo que cambia. Mire si cambiará, que hoy lo veía a Kicillof y a todo el kirchnerismo encabezando la conferencia de prensa de la oposición parlamentaria al gobierno de Macri, presentando su proyecto unificado de Ganancias.
—Cierto. Y no deja de ser divertido que el gobierno de Macri defienda el impuesto a las ganancias con idénticos argumentos a los que usaba el gobierno anterior.
—¿Divertido? Salvo para el 3% de los trabajadores que pagan Ganancias, esos privilegiados egoístas que se resisten a colaborar solidariamente con los desposeídos y hasta hacen marchas para rechazar hacer su contribución a la justicia social que nos propone el gobierno de Macri. No entienden que ése es el aporte que deben hacer, mientras se les afloja el cinto a las mineras y a los industriales para que inviertan, puedan crecer y derramar algo. Lo mismo con los especuladores financieros que no pagan ganancias, para que saquen un poquito de eso que tienen invertido en plazos fijos multimillonarios, en Lebac y en bicicleta financiera, y ellos también inviertan alguito para que la cosa se mueva. Pero no, esos egoístas incorregibles que ganan fortunas mensuales, de 25.000 para arriba, no están dispuestos a hacer su mínimo esfuerzo. ¡Cómo puede crecer así un país!
—Ah, está irónico. Muy bueno lo suyo. De todos modos, eso lo inventó el kirchnerismo, así que en eso son parecidos. También en eso, debería decir.
—¿De qué habla?
—Ese recurso de atacar a cualquiera que reclame, aún si se trata de alguien que hasta recién era aliado, como es el caso de los trabajadores y jubilados que pagan Ganancias. Esos casi dos millones de personas que, me juego, le dieron el triunfo a Macri. Yo le recomendaría que no vaya por ese camino, porque termina peleándose con todo el mundo, como le pasó a Cristina.
(Más información en la edición gráfica número 1052 de la revista ANALISIS del jueves 8 de diciembre de 2016)