
El cura párroco de la Parroquia “Asunción de María” de Gualeguaychú, Enrique Caballero, brindó un panorama de la realidad social de su comunidad en este contexto de crisis económica a nivel país.
El cura párroco de la Parroquia “Asunción de María” de Gualeguaychú, Enrique Caballero, brindó un panorama de la realidad social de su comunidad en este contexto de crisis económica a nivel país.
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), el sacerdote sostuvo que “la realidad en la ciudad es la que todos los días se experimenta en todo el país lamentablemente; hay mucha necesidad y la cuestión principal es la falta de trabajo”. “La gente no tiene cómo conseguir medios para poder vivir un poquito mejor, ya se acrecienta más el pedido de comestibles que es lo elemental para estar bien. Gracias a dios hay alguna respuesta de la gente que puede hacer alguna donación y con eso vamos tirando”, resumió.
Caballero comentó que desde febrero está cargo de la Parroquia “Asunción de María” y su destino anterior fue Villa Paranacito, y diferenció que “casi todo el tiempo antes había estado en Gualeguaychú, en la parroquia San Francisco, y desde que me fui en 2015 hasta ahora veo un cambio grande en la población que aumenta, los barrios que crecen, y en ese sentido se ve que hay más preocupación y ocupación por que la gente tenga sus viviendas pero en lo demás estamos muy pobres”.
Recordó que antes de 2015 la Parroquia San Francisco “estaba más organizada la asistencia de la gente en alimentos, hay un comedor y muy cerca hay otro comedor municipal, y entonces estábamos bien para poder ofrecer algo más; en cambio ahora, en el tiempo que llevo, no hemos podido ni siquiera pensar en algo para asistir a la gente”.
Sobre la asistencia que se despliega desde la Iglesia, sostuvo que “permanentemente se va viendo el modo de estar presentes en estas situaciones pero nos complica la falta de medios para poder atender bien a la gente”. “Lo que se puede, se va haciendo con la colaboración de mucha gente que puede, que hace su aporte, especialmente en alimentos que es lo más urgente en este tiempo”, sentenció.
En ese sentido, valoró “la solidaridad” de los vecinos y contó: “Nos duele mucho tener que decirles que no hay más, pero no sabemos cómo hacer; sabemos que acompañamos algo pero hasta ahí nomás, porque no se puede más”.
En cuanto a la asistencia de la dirigencia política, dijo que “por ahí algun aporte de alimentos pero no conozco mucho esa realidad para poder conseguir más colaboración pero somos conscientes de que la realidad en general es compleja”.
Sobre la problemática de las adicciones, mencionó que “es tremendo y crece y en ese sentido se trabaja desde el Hogar de Cristo que se comenzó en barrio Cuchilla se instaló aquí otro lugar para la atención de quienes padecen este problema y gracias a Dios se va haciendo un trabajo para acompañarlos, ayudarlos a recuperarse pero es una plaga que se extiende y nos e sabe adónde encontrarle la vuelta para frenarlo un poco”. Por último, afirmó que el problema “creció mucho”.