
Ya no será optativo el aislamiento y el PCR. La medida surge en pleno aumento de casos en los países vecinos y mientras se analiza cerrar las fronteras.
Quienes lleguen del exterior deberán hacer siete días de aislamiento y un test PCR para confirmar o descartar si tienen coronavirus, según la disposición adoptada este martes por el gobierno nacional.
La medida surge en pleno aumento de casos en los países vecinos y mientras desde la Casa Rosada analizan llevar a cabo un cierre de fronteras. En las últimas 24 horas, el reporte epidemiológico que distribuye el Ministerio de Salud informó 8141 nuevos contagios y 257 muertos en las últimas 24 horas en nuestro país.
En la última disposición, informada el martes 15, los Ministerios del Interior y de Salud habían prorrogado hasta el 8 de enero la aplicación de la medida que determina que los argentinos nativos y extranjeros residentes debían presentar PCR negativo de coronavirus como requisito migratorio para el ingreso al país, o bien realizar una cuarentena. Es decir, podían elegir una entre dos opciones.
La nueva cepa detectada en Europa y el aumento de casos en Brasil forjaron largas conversaciones entre el Presidente, su ministro de Salud Ginés González García, el jefe de Gabinete Santiago Cafiero y el ministro del Interior Eduardo “Wado” de Pedro. Y delinearon una nueva hoja de ruta.
Ante el recrudecimiento de la situación sanitaria en la región y el mundo, el Gobierno analiza implementar un cierre de fronteras “selectivo” en base a la actualidad de cada país, tal como ocurrió con Gran Bretaña. No se descarta la clausura completa de las puertas de entrada al país, aunque esta alternativa correría con menos chances. “Podría ser algo quirúrgico en un principio, Nación por Nación”, explicaron fuentes de la Casa Rosada a TN.