Denuncian supuestas irregularidades en un claustro de la Facultad de Ciencias de la Gestión

Paradojas de la normalización

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1014

Natalia Buiatti

Falsificar firmas, sostener en un cargo a gente que no reúne los requisitos para ocuparlo y proscribir buena parte de un padrón son acciones que, de sólo pensarlas, escandalizan. Si bien no llama demasiado la atención cuando en medio de procesos eleccionarios se denuncia este tipo de prácticas -más comunes de lo que después recuerda cierta conciencia colectiva-, pensarlas en comicios universitarios es otro cantar. El sentido común supone que determinadas malas costumbres que se dan en ámbitos no académicos, no tienen lugar en órganos colegiados por el sólo hecho de conformar, al menos en apariencia, entidades más serias. Más aún cuando se habla de normalización. Y es que son éstas, entre otras, las supuestas irregularidades acusadas en el marco de la Facultad de Ciencias de la Gestión de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader). Una de las sospechadas anomalías ya recaló en el fuero penal local, por no encontrar eco en los ámbitos internos correspondientes.

Hugo Macchi, el primer egresado de la carrera de Administración de la Facultad de Ciencias de la Gestión, fue integrante por años del Consejo Superior de la Uader, en representación del claustro de Graduados. También ocupó el cargo de director ad honorem del Departamento de Egresados y Graduados de la Facultad, desde junio hasta diciembre de 2012, cuando renunció.

Ese año fue, para Macchi, uno que recordará no sólo por el arduo reclamo estudiantil que derivó en la concreción del proceso de normalización de la Uader, sino porque le falsificaron la firma. Alguien estampó su rúbrica personal para avalar una lista de candidatos que participó y ganó las elecciones de consejeros directivos del claustro de Graduados. Sin embargo, cuando la nómina fue formalizada, en febrero de 2012, Macchi no estaba en el país. Y así quedó asentado en la causa que actualmente se tramita en el Juzgado de Transición número 3 de Paraná, a cargo de Gustavo Maldonado.

Macchi regresó a la Argentina en marzo de 2012, cuando las listas y sus avales ya habían sido presentados. De esta forma, “Unidad Graduados de Gestión” estaba garantizada por el hombre de la academia, pero ni la firma ni el domicilio que se consignaban le pertenecían.

(más información en la edición gráfica de ANALISIS del jueves 27 de noviembre de 2014)

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