
La concentración fue este lunes por la noche y este martes tendrá una nueva edición.
Vecinos de María Grande se manifestaron frente a la comisaría local la noche de este lunes, para rechazar la presencia de los hermanos Brian Exequiel y Alexis Siboldi, quienes cumplirán prisión domiciliaria en esa localidad.
Tanto los mencionados jóvenes como su padre, Oscar Aníbal Siboldi, están detenidos en el marco de la investigación por el triple crimen de Bajada Grande, ocurrido hace tres meses en ese barrio de Paraná.
Esta mañana, la jueza Marina Barbagelata resolvió extender el plazo de la prisión preventiva para los tres sospechosos. Si bien Oscar Siboldi continuará en la Unidad Penal Nº1 de la capital entrerriana, los dos hijos permanecerán con prisión domiciliaria en una vivienda de María Grande, por un acuerdo de la fiscal Patricia Yedro con la defensa.
Esto último generó preocupación entre los vecinos de esa ciudad, que decidieron congregarse y elevar un petitorio a las autoridades. El comisario recibió el documento y se comprometió a elevarlo a la Fiscalía de Paraná.
Masiva movilización: “No hay nadie que se haga responsables de ellos”, dijo Miguel Cian
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), el periodista de María Grande, Miguel Cian, contó que en la movilización participaron “unas 700 personas, lo que no es poco para una ciudad como María Grande” y contó que la convocatoria “surgió espontáneamente luego de que se tomara conocimiento de la medida judicial pasado el mediodía”. “En Facebook puse como pregunta si nos juntábamos en el reloj a las 20 y a partir de ahí se fueron uniendo los vecinos, por lo cual pusimos en conocimiento al comisario y al intendente de la manifestación que se iba a realizar”, relató.
Mencionó también que “hasta las 22 del lunes no habían llegado cédulas de traslado, pero en la misma movilización el titular de una inmobiliaria contó que les alquiló una casa hace un mes”.
Acotó que los jóvenes Siboldi “no tienen ningún tipo de vinculación” con la comunidad de María Grande” y apuntó que “una señora de apellido González alquiló hace un mes una casa, pagando la garantía y dos meses por adelantado y en efectivo, y puso como garante un empleado municipal de Paraná y una persona que trabaja en el CGE”. “Por lo que se sabe, en este momento no vive nadie, pero hace unos 15 a 20 días, desembarcaron con muebles y demás”, señaló Cian.

Puntualizó que “se entregó una nota dirigida al comisario del pueblo donde ponemos de manifiesto nuestra sorpresa y nuestra negativa, y le indicamos que consideramos que esta gente necesita una contención y rehabilitación que en la ciudad no hay” y agregó que “la respuesta fue que se elevará el petitorio a las autoridades para canalizarlo, y el intendente manifestó que se había puesto en contacto con Rosario Romero y en la mañana de hoy verán si se puede dar alguna novedad al respecto”.
“El problema que planteamos es lo que será las personas que llegarán a María Grande a verlos, en la “mala junta” que habrá, y si bien no somos de discriminar a nadie, como ciudadano no lo queremos y no lo podemos permitir”, sentenció.
En ese marco, reclamó que “no hay nadie que se haga responsables de ellos, de contenerlos; no los conocemos, no sabemos si habrá alguien que garantice que estos chicos cumplen efectivamente el arresto domiciliario y no andan en la calle”. “Alguien tiene que hacerse responsable de estas personas, porque si pasa algo a quien vamos a responsabilizar”, se preguntó.
"Es problemático porque si bien estos chicos no están condenados, primero tenemos que cuidar a los sanos y luego ocuparnos de los enfermos. María Grande es una comunidad sana, que quiere progresar y nuestro esfuerzo tiene que estar dado en la contención y el cuidado de la gente local", concluyó.
El hecho
Alrededor de las 4 de la madrugada del sábado 25 de mayo en una vivienda de barrio La Aceitera, en inmediaciones de calles Valentín Denis y Procesión Náutica, la Policía halló muertos a dos hombres jóvenes.
Un tercero estaba gravemente herido, baleado en la cabeza, quien falleció tres horas después en el Hospital San Martín. Se trataba de Luciano Álvarez -de 37 años-, Miguel Aguirre -de 35- y Leonardo Martín Álvarez -de 29-.
La principal hipótesis indica que el ataque a tiros contra las víctimas fue como represalia contra las agresiones a la joven de 23 años, expareja de uno de los fallecidos y en una actual relación con uno de los detenidos, de quien estaría embarazada.
En diálogo con Ahora, el director de Investigaciones de la Policía de Entre Ríos, Fabio Jurajuría, informó que "una de las hipótesis se refiere a un problema que hubo con la joven que está detenida". "Ella es la actual pareja del Siboldi de 54 años y ex de uno de los Álvarez fallecido", aclaró.
"Estaban todos tomando alcohol y aparentemente el ex la empezó a insultar a la joven, sacándole a relucir que ahora está embarazada de su nueva pareja", reveló. "Ella dice que está embarazada, lo deberá constatar el médico", añadió. "Pero no se descartan otras hipótesis, como que haya de fondo un tema de drogas; seguimos investigando", informó el funcionario.