Una visita con efecto

El técnico mendocino hace tiempo que está al frente del equipo argentino de tenis de mesa, una disciplina olímpica que en nuestro país está en pleno crecimiento. Tiene a su cargo jugadores que se dedican a esta actividad y que hacen carrera profesional en Europa. Entre otros temas, llegó a Paraná para observar a Agustín Asmu, el pibe de 10 años que es campeón Argentino Sub11 y que el DT considera un fuera de serie. “Este pibe es de esos talentos que aparecen cada tanto en el país. No tengo dudas que va ser un jugador de selección durante mucho tiempo”, dijo. “No me molesta que le digan ping pong. Lo importante es que se hable de la actividad. Es la mejor manera de darle difusión”, agregó.
Pablo Rochi
Hace tiempo es el referente del tenis de mesa en nuestro país. Es un apasionado de la actividad, un estudioso y un docente de las actuales y anteriores camadas. En sus testimonios rápidamente queda reflejado el conocimiento de una actividad deportiva que en Argentina goza de un crecimiento importante, por más que aún hay mucho por recorrer.
No le molesta que hablen de ping pong, por más que insiste que el deporte es tenis de mesa. “Mientras hagamos referencia a este deporte, no me molesta que hablen de ping pong. Lo importante es que se hable de la actividad. Es la mejor manera de darle difusión”, dice el protagonista en cuestión.
El mendocino Matías Alto desde hace años es el entrenador del equipo argentino de tenis de mesa. Tiene a su cargo a los mejores exponentes, algunos de ellos construyendo sus carreras profesionales en Europa.
“Claro que se puede vivir del tenis de mesa, pero hay que irse a Europa, donde están las mejores Ligas”, aclara.
Matías Alto llegó días atrás a Paraná como parte delPlan de Desarrollo que se encuentra en todo el país, organizado por la Federación Argentina de tenis de mesa
“Entre Ríos es una de las provincias que más creció en este último tiempo”, dice. No obstante, su visita también se llevó adelante porque Alto está fascinado con Agustín Asmu, el pibe paranaense de 10 años que es campeón argentino y que el entrenador define como un jugador de enorme futuro.
"La idea es conocer Paraná y conocer aún más a Agustín (Asmu), este pibe que es de esos talentos que aparecen cada tanto en el país. Lo hacemos para apoyarlo y guiarlo porque no tengo dudas que va ser un jugador de selección durante mucho tiempo. La idea es, de ahora en más, tener un seguimiento más cercano para seguir su evolución", contó, dando detalles del pequeño gran talento que hay en la capital entrerriana.
-¿Qué vez en Agustín que se le pone tanto enfoque?
-Son de esos jugadores que de chico tienen muchísimo talento, agregado a que tiene un padre que es entrenador de tenis de mesa y un apasionado de este deporte. Nosotros no contamos con la cantidad de pibes como tiene el fútbol o el básquet, entonces, un talento así hay que apoyarlo. Y para que siga creciendo necesita viajar y competir, y no cualquier padre tiene los recursos para hacerlo.
-Y en cuanto a condiciones, ¿qué tiene Agustín para ser un proyecto serio?
-Es muy raro ver a chicos tan chicos y que sean tan potentes y sean tan rápidos. En ese sentido, el tenis de mesa se asemeja al boxeo porque hay que ser muy rápido en distancias muy cortas. Agustín tiene eso, potencia y velocidad. Es lo que nosotros llamamos “Rally”. Él se aleja de la mesa y puede estar muchos minutos pegándole a la pelotita que no pierde y no se cansa. Le tirás a una punta y llega, y le tiras a la otra punta y también llega. Como para graficarlo mejor, es nuestro Rafael Nadal pero en miniatura. Además, tiene una mentalidad muy fuerte. Te lucha todo el partido y no se rinde nunca. Todas esas condiciones verlas en alguien tan chico es difícil. Si vos trabajas fuerte, a un chico de 18 años podes sacar con esas condiciones. Agustín ya lo tiene por naturaleza.
(Más información en la edición gráfica número 1109 de la revista ANALISIS del jueves 5 de diciembre de 2019)