
“La provincia tiene un plan rector de vacunación; la urgencia es inmunizar a la mayor cantidad de población posible en el menor tiempo para poder prevenir la segunda ola o que no sea tan intensa", afirmó Velázquez.
La ministra de Salud de Entre Ríos, Sonia Velázquez, brindó un panorama de la situación provincial y especialmente de la costa del Uruguay donde hay un incremento de contagios de Covid-19. Habló de las expectativas de la vacuna pero remarcó la necesidad de sostener las medidas de prevención y cuidado.
En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Velázquez afirmó que desde el área de Salud están “muy atentos, monitoreando indicadores que brindan el comportamiento de cómo se va presentando el virus y tanto Concordia como Concepción del Uruguay que hoy ingresa en transmisión comunitaria sostenida, son dos localidades donde se está monitoreando con el termómetro muy de cerca porque se han presentado las mismas situaciones epidemiológicas que se presentaron en Paraná hace dos meses atrás”.
Especificó que “primero se contagió el personal esencial, luego se dan contagios en los grupos de jóvenes, y lo que se desarrolla siempre es que después vienen los fallecidos de personas más vulnerables con factores de riesgo”.
Explicitó que “hay que tener en cuenta que la situación que se presenta en este momento en Concepción del Uruguay, se presenta a nueve meses de declarada la pandemia con un hastío bastante importante de la población y en víspera de las fechas más sensibles de la humanidad como Navidad y Año Nuevo, entonces lo que pasa es que les cuesta muchísimo lograr la adherencia de la gente a las medidas de prevención para equilibrar el estatus sanitario”.
Ante ello, agregó que “el Covid sigue siendo una amenaza para la salud pública y para las economías regionales y seguimos dependiendo muchísimo de los cuidados básicos fundamentales y la concientización de la población, amén de que el Estado sigue muy presente y que nuestros trabajadores de salud no han bajado los brazos”.
Por otra parte, Velázquez detalló que “hoy hay alrededor de 150 trabajadores de salud en aislamiento preventivo en la provincia; bajó bastante el porcentaje de afectación en los trabajadores de la salud y también esto tiene que ver con que han internalizado muchísimo el uso responsable de los elementos de protección personal, la mayoría de los contagios no se da de forma vertical –en contacto directo con el paciente- sino más bien de forma horizontal porque se relajan en los descansos tras tantas horas de trabajo”. Agregó que “hay algunos trabajadores de la salud internados, en terapia intensiva, y se los está monitoreando muy de cerca porque siempre genera mucha preocupación porque se trata de recursos humanos muy valiosos para todo el colectivo de trabajadores de la salud”.
Confirmó también que “en total fallecieron nueve personas: tres enfermeros en ejercicio y otros que no estaban en ejercicio pero también fallecieron por factores de comorbilidad preexistentes” y puntualizó que entre los contagiados “hay de Concordia y Concepción del Uruguay pero también del Departamento La Paz, Victoria, Gualeguaychú y Paraná. Hoy la mayor concentración está en la costa del Uruguay”.
En este contexto, explicó que “la situación en la costa del Uruguay tiene que ver con el derrame que se produjo desde Paraná, es por la circulación de personas. En este momento estamos evaluando muy de cerca los nexos epidemiológicos que dan cuenta que el contagio se produce por la interacción provincial, no tanto por la interacción con la República Oriental del Uruguay, donde efectivamente -como otros países del Cono Sur, como Paraguay- están haciendo un colapso del sistema sanitario”.
Analizó que “el virus ingresó a este país por Ezeiza por eso la concentración de contagios que se dio en la Ciudad de Buenos Aires y posteriormente de los casos importados fueron por vía terrestre de las personas que venían de Brasil al final del primer trimestre del año. A las ciudades ingresa el virus por la interacción social que se da, por eso esto es mundial y no hubo forma de evitarlo; lo que se hizo es retrasar la llegada del virus pero es tan fuerte el contagio a nivel de la interacción social que los países y las provincias se terminaron contagiando, porque no pueden estar aislados de por vida”.
Refirió que “hay comunidades rurales de la provincia que no han tenido ningún caso y eso tiene que ver con los hábitos y las conductas de las personas, y con los espacios abiertos. Por eso la época del verano es propicia para esta provincia donde es mejor aprovechar los espacios libres, mantener las distancias, airear los ambientes y demás recomendaciones”.
Como ejemplo, mencionó que “después del brote de bronquiolitis que fue tan fuerte en 2007 y que tuvo mortandad de pibes, este año no hubo casos de esta enfermedad y esto tuvo que ver con la no interacción de los chicos en los lugares de mayor concentración como jardines, guarderías, escuelas. En este 2020 hubo una disminución abrupta de casos que nunca se había tenido desde que se instaló el virus sincicial respiratorio que provoca la bronquiolitis en niños, y tampoco hubo casos de influenza”.
“El comportamiento de lo que está sucediendo hoy y que llevó a plantear un alerta sanitaria es el relajamiento de las conductas, una falsa ilusión con la espera de la vacuna, el cansancio lógico y entendible. De todos modos, lo que no tenemos que perder es esa cordura responsable que tiene que ver con la ética del cuidado. Uno piensa en los pibes que terminaron el colegio y que querían festejar, pero estamos tratando de que se pueda concientizar es que hay que resguardar a los adultos mayores y a las personas con factores de riesgo, porque las internaciones y las muertes siguen existiendo”, advirtió la ministra.
Ante ello, planteó que “si bien la provincia tiene una ocupación de camas UTI del 57% y el total de los pacientes Covid es del 37%, es un porcentaje equilibrado, lo que planteamos es tener un equilibrio, pode empezar a vacunar y a trabajar en una instancia de horizonte y esperanza”.
Plan de vacunación
Respecto del esquema para inocular la vacuna, Velázquez aseguró que la provincia tiene “un plan rector de vacunación que se aprobó desde el Ministerio de Salud de la Nación que consiste en tres ejes: un componente de organización, nominalizando a las personas que serían la población objetivo con nombre, apellido, lugar de residencia y georreferencia de un cronograma de vacunatorios y otros dispositivos, y lo que ha llevado más tiempo es la logística porque estamos pensando distintos escenarios de acuerdo a las características de la vacuna que vamos a recibir”.
“En este caso se trabaja con una proyección de una vacuna, según los acuerdos del gobierno argentino, que llevará un refrigeración distinta a lo que se maneja en la vacunación tradicional. A la vacuna más tradicional que la de AstraZeneca de Oxford la vamos a tener recién en marzo”, explicitó.
De todos modos, sostuvo que “la urgencia es inmunizar a la mayor cantidad de población posible en el menor tiempo para poder prevenir la segunda ola o que esa segunda ola no sea tan intensa, porque contamos con el mismo recurso humano, somos los mismos para otra etapa, y ni siquiera nos renovamos porque no nos ha dado tiempo para tener un equipo de recambio”.
Advirtió que todo el proceso de vacunación “llevará un año y por eso estamos extremando todas las proyecciones y la planificación para que el rebrote no sea tan intenso y se pueda prevenir morbilidad y mortalidad, porque al no tener un tratamiento efectivo para el coronavirus a nivel mundial, también ha ocasionado que se disponga solamente de la vacuna. Si bien hay adelantos y algunos tratamientos que son evaluados por el ANMAT, hoy lo que contamos como proyección u horizonte es la vacuna”.
“Vamos aprendiendo de lo que pasa en otros países, que tuvieron el verano y siguieron con casos, y es lo que nos va a pasar a nosotros, por eso la necesidad de establecer el alerta sanitaria para concientizar de que la pandemia no pasó, el coronavirus sigue siendo una realidad que contagia y causa muertes”, alertó.
“Estamos esperanzados con la vacuna pero también con una responsabilidad de poder garantizar todo lo que esté a nuestro alcance y estar a la altura de las circunstancias como Estado garante de una política pública, porque con mucho acompañamiento del sector privado ha sido el Estado quien se puso al frente. Y en este sentido, la campaña de vacunación significa vacunar a casi la totalidad del Planeta como única estrategia sanitara para detener la pandemia y se intenta llevar inmunidad comunitaria a la mayor cantidad de personas”, planteó. “Esto resulta una epopeya científica nunca antes vista, porque se trabaja contrarreloj, incluso con los organismos de certificación internacionales”, resumió.
Por último, sostuvo que desde la provincia “se está garantizando un plan rector, para no tener ninguna improvisación a la hora de la llegada de la vacuna, ya ingresó equipamiento que se compró, se trabaja con el Ejercito, la policía provincial, con las Universidades que acompañarán con la logística y recursos humanos. Cada equipo vacunador para tener una llegada más rápida y ser efectivo, requiere de un vacunar, de alguien que registre, de alguien que cargue la vacuna y se estima que pude ser de cuatro minutos por cada persona a vacunar”.
“Hay más de 389 vacunatorios peri se van a duplicar con dispositivos en escuelas y otros centros, y tenemos más de 1.000 vacunadores que están terminando la capacitación. En este momento se está desarrollando un Coom con los referentes de inmunizaciones de toda la provincia y los coordinadores de salud de los distintos Departamentos para pensar esta planificación, porque por ejemplo, tenemos que llegar a vacunar a zona de islas donde hay que llegar a través de Prefectura, y a otros lugares recónditos de la provincia”, concluyó.