Inhumaron los restos del exintendente Sergio Varisco.
De ANÁLISIS
En el portal principal del Cementerio Municipal de Paraná, antes de las 16.30, había personas esperando dar el último adiós al exintendente Sergio Varisco. Eran fundamentalmente militantes, grupos de familias que llegaron por sus propios medios, en sus autos particulares y caminando. Se ubicaron en el playón de ingreso a la necrópolis. Algunos se acercaron y preguntaron si podían pasar.
—Sólo familiares—repitió el policía que estaba parado delante del portón. Al recibir la respuesta siguieron sus pasos y se ubicaron en uno de los laterales de la entrada. Otros simplemente se acercaron caminando despacio y no preguntaron nada, quedaron frenados a pocos metros del ingreso. Se acarició la desazón del momento con palmadas y abrazos fraternos.
Exactamente a las 16.40 se oyó cómo abrieron el portal del Cementerio. A lo lejos se escuchaba la sirena de una grúa que abría el tránsito desde las inmediaciones del Concejo Deliberante -en calle Andrés Pazos y Corrientes-. Sergio Varisco fue velado en esa esquina céntrica y a pocos metros del Palacio Municipal que lo tuvo como jefe electo entre 1999 y 2003, y entre 2015 y 2019. Desde allí partió la caravana esta tarde, pasó por el Comité Provincial de la Unión Cívica Radical (UCR) y bajó hasta calle Mendoza. La llegada del féretro se recibió con aplausos y el silbido de una autobomba.
De momento repiquetearon las campanas del campo santo y de la carroza de luto bajaron algunos hombres para abrir el coche. Después sonaron trompetas fúnebres. Una bandera radical cubría el cajón del ex mandatario municipal. El féretro fue acarreado en medio de un tumulto que presionó para entrar. Varios lo lograron, pese al pedido explícito del personal del Cementerio.
Lucía Varisco -hija del dirigente extinto y diputada provincial-; y Claudia Acevedo -su última pareja y concejal- estuvieron acompañadas por militantes y exfuncionarios del gobiernos radicales. Se vio a los defensores Miguel Ángel Cullen y Rubén Pagliotto; al exconcejal Carlos González; al ex ministro de Gobierno de Sergio Montiel, Enrique Carbó; y al exsecretario de Servicios Públicos de la Municipalidad, Roberto Sabbioni, entre otros.
La despedida se fue apagando lentamente. Antes de las 17.30 salieron los familiares y amigos que asistieron al entierro. Ya habían inhumado los los restos. Esas personas del círculo íntimo estuvieron desde el mediodía de este jueves en el salón Mariano Moreno del Concejo Deliberante, lugar que se mantuvo con una concurrencia discreta y donde se vio en las primeras horas del velatorio a la vicegobernadora Laura Stratta.
El acompañamiento de los allegados a Varisco en las últimas semanas fue intenso. El exintendente fue operado por un tumor en los pulmones y fue dado de alta. Pero a los pocos días debió retornar a la Clínica Modelo y padeció una neumonía de la que no se recuperó. Para la familia, ese periplo duró unos 15 días hasta este jueves.
