Sobre lo obvio, les debo el argumento
Por Darío Dayub (*) Abracé una carrera que me formo para argumentar, la abogacía. Leí todo lo que pasó ante mí para enriquecerme de palabras al hacerlo; cursé oratoria para lograr expresarme más florido y preciso; el teatro fortalece mi histrionismo, extroversión y seguridad al hablar. Pero nada de esto me alcanza para argumentar sobre lo obvio