Sexismo y Juegos Olímpicos: romper el reglamento
Jamás imaginé que sería tan fanática de los Juegos Olímpicos. No puedo dejar de mirar cualquiera de las disciplinas. Siento que nos hizo juntarnos como si se tratara del mundial e introdujo en las charlas cotidianas el lenguaje del deporte olímpico. Además, el desfile de deportistas que nos enorgullecen nos ha provisto de una catarata de emociones. En esta ocasión, no solo por la satisfacción de sentirnos representados como nación, sino también porque conmueve tanto esfuerzo colectivo e individual y todos los sacrificios que han hecho para estar ahí.