Contracultura y resignificación

Pablo Javier Canavelli
Dice Eduardo Galeano en “Nosotros decimos No” (Crónicas 1963 -1988): “Nuestra auténtica identidad colectiva nace del pasado y se nutre de él – huellas sobre las que caminan nuestros pies, pasos que presienten nuestros andares de ahora – pero no se cristaliza en la nostalgia. No vamos a encontrar, por cierto, nuestro escondido rostro en la perpetuación artificial de trajes, costumbres y objetos típicos que los turistas exigen a los pueblos vencidos. Somos lo que hacemos, y sobre todo lo que hacemos para cambiar lo que somos: nuestra identidad reside en la acción y en la lucha. Por eso la revelación de lo que somos implica la denuncia de lo que nos impide ser lo que podemos ser. Nos definimos a partir del desafío y por oposición al obstáculo”.
El Contrafestejo, según su propia página web (www.contrafestejo.com.ar) intenta “propiciar un espacio de reflexión colectiva y una profunda vocación por revitalizar nuestra identidad sin omisiones ni distorsiones, como resistencia a la globalización neoliberal del pensamiento y la cultura, a favor del respeto por la diversidad étnica y cultural y de la igualdad de oportunidades, contra el egoísmo y la marginación tan presentes en nuestra sociedad”.