A días del Mundial de sóftbol en Praga, la Selección Argentina otra vez estará integrada por gran mayoría de jugadores paranaenses

Guantes y bates, con cantidad y calidad

Edición
1095

Pablo Rochi

No falta mucho. El Mundial de sóftbol está a la vuelta de la esquina y por ende ya es tiempo de pulir los detalles para llegar de la mejor forma. Praga, República Checa, será la sede de la próxima edición de la copa del Mundo, la que se estará disputando del 13 al 23 de junio próximo.

En busca de la excelencia. Así se encuentra la actual generación de softbolistas argentinos que desde hace tiempo se codean con los mejores del mundo y que entienden que ésta será una oportunidad muy buena como para dar un paso superior. Entonces, meterse en podio es una misión tan difícil como desafiante.
Mientras entrenan, se preparan y aceitan mecanismos de juego para llegar al Mundial en óptimas condiciones, surgen situaciones y episodios que hacen a esta actividad y que provocan reacciones.

Una vez más, y como ocurre desde hace mucho tiempo, Paraná volverá a ser determinante y vital para el armado del plantel de la Selección Argentina, ratificando su poderío en esta disciplina.

Julio Gamarci, coach del equipo argentino, confirmó el plantel que viajará a Praga para representar a nuestro país. El dato que surge de este listado a muchos no los sorprende, pero a otros sí les llama la atención: 12 de los 17 convocados para jugar para la Argentina son de Paraná.

A decir verdad, no es la primera vez que se leen estos registros. Por el contrario, han pasado diferentes generaciones y el equipo argentino mantiene una tonada bien entrerriana.

La pregunta surge de inmediato. ¿Qué fenómeno ocurre para que Paraná siga siendo plaza fundamental para nutrir a la selección con sus jugadores? ¿Es simplemente un orgullo para la capital entrerriana o es la ineficiencia de un deporte que no supo diseminar esa pasión en otras localidades?

El dato cobra mayor fuerza si se agrega que de los cinco jugadores que no nacieron en Paraná, cuatro viven en la capital entrerriana y juegan en el torneo local. Sólo Juan Cruz Zara, quien nació en Bahía Blanca y lo hace para Indios de esa ciudad, no se encuentra en Paraná. El resto de los softbolistas son parte del torneo de la Asociación Paranaense de Sóftbol (APS).

Santiago Carril, Román Godoy y Gonzalo Ojeda (todos de Don Bosco), Federico Eder, Gustavo Godoy, Manuel Godoy, Mariano Montero y Bruno Motroni (todos ellos de Patronato), Ladislao Malarczuk (Cpef Nº5), Pablo Migliavacca y Teo Migliavacca (ambos de Talleres), y Gian Scialacomo (de Estudiantes) son los jugadores paranaenses que forman parte del seleccionado.

Después están los nacidos en otras localidades, pero que juegan en la capital entrerriana: Huemul Mata (es de La Pampa y juega en Estudiantes), Federico Olheiser (de Bahía Blanca en Cpef Nº5), Alan Peker (de Villa Clara en ATSA) y Juan Potolicchio (de Esperanza en Estudiantes).

Declarada por ley como Capital Nacional de este deporte, Paraná logró un respeto muy grande a nivel internacional. Es evidente que el bate y los guantes están en su ADN.

(más información en la edición gráfica número 1095 de la revista ANALISIS del viernes 3 de mayo de 2019)

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