Saltacharcos, librería para las infancias

Un sinfín de mundos posibles

Edición
1137

Por S.A.

A principios de noviembre, un nuevo espacio abrió sus puertas en la ciudad de Paraná. Se trata de la librería Saltacharcos, dedicada a literatura para infancias y adolescencias. Fresca y atractiva, insta a los niños y a las niñas a elegir sus propias historias, a poner énfasis en lo imaginario, a leer por gusto. En diálogo con ANÁLISIS, la aventura de una librería que busca responder a esa demanda con títulos únicos y novedosos.

Las niñas y niños caminan de la mano de sus padres, tíos, abuelos, por el centro de Paraná. Quizás en busca de ese regalo o por simple paseo vespertino, marchan por las veredas angostas, aprovechando la tardecita que da la tan esperada tregua. Algo los frena, les llama la atención. Se quedan inmóvil ante una vidriera que hasta hace unas semanas no relucía de esos colores. “¡Mirá, papá!, el de superhéroes”, exclama la niña, con devota emoción.

Un hombre de unos 60 años ingresa. Observa los libros en los estantes detenidamente “ando buscando el libro ´Las princesas también se tiran pedos´”, dice, “quiero regalárselo a mi nieto”, acota y comienza el relato que lo conecta con su propia historia familiar y ornamenta la exitosa búsqueda de un libro que terminará a los pies del arbolito de Navidad.

Saltacharcos vino a apostar a esos mundos. Ubicada en calle Gualeguaychú 167 de la capital provincial, abrió sus puertas a principios de noviembre, luego de haber transitado una exitosa edición de la Feria del Libro Paraná Lee, porque, antes de formalizar locación, la librería de títulos juveniles es, ante todo, itinerante. “Nacimos hace 5 años como una librería que circulaba por ferias, como la Feria de Libros Únicos y Editoriales (FLUYE); Además, de las redes sociales y, el boca en boca, que son las fuentes necesarias de nuestra clientela, también teníamos un pequeño espacio en casa”, detalla Ana Clara Knopp, gestora de este emprendimiento.

Pero, la necesidad de expansión fue inminente y, felizmente, hizo eco en otros. A su derecha se emplaza el histórico Centro Cultural La Hendija (Gualeguaychú 171), el cual cuenta con su proyecto editorial propio, llamado Ediciones La Hendija. Del interés mutuo de ambos gestores culturales, el Centro Cultural cedió ese salón para una proyección en conjunto. “Hace poco surgió la idea de hacer este emprendimiento conjunto con Ediciones La Hendija; ocupar este espacio que está pegadito al Centro Cultural. Entonces aquí tenemos libros de Saltacharcos y los libros de Ediciones La Hendija que tiene un catálogo súper amplio. Tiene algunos títulos infantiles, pero más que nada tienen muchos títulos de educación, investigación, narrativa, poesía de autores locales, provinciales y nacionales”, explica Ana Clara Knopp sobre un vínculo que se tejió “feriando”.

¿Sabías que podés imaginar todo esto?

Saltacharcos ofrece una variedad de títulos que atrapa no sólo a chicos, sino que también a grandes apasionados lectores. No obstante, ¿de dónde salió el interés por el público infantojuvenil? “Porque tengo este recuerdo de haber disfrutado de la lectura, de haber pasado mucho tiempo en la biblioteca de la escuela, de haber revisado los estantes de mi casa, pero siempre con esta idea de que un libro a la mano hace un montón por el interés de la lectura de los chicos”, fundamenta, la gestora de Saltacharcos.

Ana Clara Knopp cuenta que este proyecto “Nace primero como un interés personal; de haber disfrutado de una infancia lectora. Cuando tuve a mis hijos, me di cuenta de que quería regalarles libros que acá en las librerías de la zona no podía conseguir. Entonces me planteé esta necesidad; un lugar que tuviera esos títulos y respondiera a un principio de bibliodiversidad, que es nuestro objetivo principal hoy en día. Empezamos con poquitas editoriales que eran amigas. Fueron primero pequeñas compras para el círculo más íntimo y después pensamos que esto realmente podía ser algo lindo, de aportar algo nuevo, de poder cubrir un espacio que estaba vacante, que podía dar para mucho más. Después se fueron sumando algunas otras; siempre con la idea de buscar cosas nuevas y seguir ampliando”.

(La nota completa en la edición 1137 de la revista ANALISIS del jueves 22 de diciembre de 2022)

Edición Impresa