En clave electoral

Tensos con el presente, anclados al pasado, hablando del futuro

Edición
1138

Tercer mes del 2023 y una frase constante: estamos en año electoral. Cuenta regresiva que todo atraviesa. No es algo menor si entendemos que aquello que hagamos o dejemos de hacer para decidir en la elección (nacional, provincial, local), nos va a marcar por el tiempo que sigue. Marzo, mes de memorial profundo. Nobleza obliga destacar que más allá de tiempos oscuros que no han de repetirse y de dolores intensos que nos marcaron, alcanzamos los 40 años de democracia ininterrumpidos. Con no poco sobresalto, llegamos. Y hay que seguir. La propuesta es no caer en la trampa de la desatención, en la desconfianza constante. Evitarloayudará a elegir mejor. Prepararnos para entender y pasar el cedazo a conciencia se torna imperioso para no retroceder. Muchos aspirantes a ser, aparecen tensos con el presente, anclados al pasado (reciente o no tanto) y hablando de futuro. En estos nuevos tiempos, prestar atención y no dejar que otros decidan por nosotros.

Néstor Banega

¡Como estamos hoy, eh!

Sociedad golpeada, que cambia acelerada y profundamente. Es inevitable. Una nueva época que brinda un marco difuso. Tiempos líquidos dicen algunos pensadores. Las propuestas que aparecen, tratando de ganarse el apoyo de un electorado distante (donde los que observan desconfiados son mayoría), generan poco interés.

Y para completar el combo,los liderazgos más reconocidos a nivel nacional se disputan los primeros lugares con altísima imagen negativa. Paradójico, pero no tanto si acordamos que muchos (hay excepciones) de los que se auto perciben dirigentes y los que realmente lo son, parecen alejados de lo cotidiano.

Se la pasan criticando al pasado, reciente o no tanto, en lo que parece ser la forma que tienen para hablar del futuro. No da. No va. Hay que levantar la puntería, y esto, es afirmación y ruego.

Construir ciudadanía no es fácil, más allá de los justificados enojos, hay que romper de algún modo con una tendencia preocupante: nos alejamos de cuestionesque son determinantes para nuestra vida cotidiana. No lo podemos permitir si realmente queremos que todo mejore. Hay que poner un poco mas de atención.

Dañinos

Muchos intereses e interesados se especializan en promover desánimo. Es real que no está todo perfecto, pero no podemos dejar de participar de algún modo en los procesos que permitirán mejorar y consolidar la democracia.

Un juego perverso que se repite por estos días es el que encaran aquellos que pasan sus horas renegando del sistema, de la democracia, de lo que fuera.

(La nota completa en la edición 1138 de la revista ANALISIS del jueves 2 de marzo de 2023)

Edición Impresa