El Principio Federativo de Proudhon

Alejo Peyret publicaba, a fines de 1864, la primera traducción al español de la obra del anarquista francés Pierre Joseph Proudhon, en las páginas del diario urquicista El Uruguay.
Por Américo Schvartzman
Nos vamos a remontar a 160 años atrás (una forma eficaz y disfrutable es hacerlo de la mano de la extraordinaria novela de María Esther de Miguel, Jaque a Paysandú. Lo recomiendo enfáticamente, pero después de terminar de leer esta nota).
Mientras, resumiré el contexto. Estamos a fines de 1864. La “organización nacional” impulsada por Urquiza ya no era lo que había soñado: resignado su poder ante Mitre en Pavón, reformada la Constitución para ceder a las pretensiones porteñas, replegado Urquiza en su Palacio y dedicado a sus intereses mercantiles, el poder porteño, intacto, previsiblemente decide ir por más. Ex rosistas y ex antirrosistas están otra vez juntos ante el nuevo “enemigo” común: Urquiza. Aunque pactaron con él, ahora la tarea es demolerlo definitivamente, tomar el poder en todas las provincias y en la medida que sea posible, desactivar ese nido de rebelión federal que, desde hace medio siglo, es Entre Ríos (Artigas, Ramírez, Urquiza, López Jordán… hay que anular esa provincia peligrosa y orgullosa que ya varias veces derrotó a los porteños y ató sus caballos en la Pirámide de Mayo).
Con Mitre presidente, la élite librecambista porteña decide someter a las provincias, pero también “exportar” la libertad de comercio a países vecinos. En ese marco las fuerzas de Mitre sojuzgan a caudillos federales provinciales, derrocan gobiernos y ponen a los suyos (como en las provincias cuyanas), degüellan sin miramientos al Chacho Peñaloza, conspiran con el Imperio del Brasil para liquidar al mariscal López que lideraba un Estado autónomo y progresista en Paraguay y, en nuestra zona, contribuyen a la destrucción de Paysandú, reducto federal defendido heroicamente por Leandro Gómez, acompañado por entrerrianos como Lucas Píriz.
Las crónicas de época cuentan cómo iban los uruguayenses asombrados a lo que ya entonces se llamaba “el Paso de Vera”, a contemplar perplejos el bombardeo incesante e inhumano contra Paysandú. Entrerrianos y federales (entre ellos un hijo de Urquiza) se plegaban a la heroica defensa encabezada por Leandro Gómez.
En esos mismos días, el filósofo en acción de origen francés, Alejo Peyret, publicaba en las páginas de un periódico urquicista (El Uruguay, que se editaba desde una década antes en Concepción del Uruguay) una obra teórica muy importante de Pierre-Joseph Proudhon, uno de los padres del pensamiento filosófico anarquista.
Era la primera vez que se traducía al español, con lo cual Peyret (que en realidad había empezado a meter textos de Proudhon en El Uruguay un par de años antes) introducía así en la región el pensamiento libertario. Además, Peyret anota al pie allí mismo sus análisis propios usando a Proudhon para defender un federalismo social e igualitario en el Plata, y proponer ideas innovadoras para el país que adoptó como suyo.
Un pensador en acción
Peyret es una figura singular de nuestro pasado, cuyas ideas de libertad e igualdad y cuya labor como impulsor de instituciones transformadoras dejaron huella en la región. A mediados del siglo XIX, este filósofo en acción afincado en Entre Ríos puso en marcha una “pequeña república” (la Colonia San José) a partir de sus ideales de una democracia agraria, de pequeños propietarios asociados y cooperantes, con igualdad de varones y mujeres, estado laico, educación universal integral, sin cuerpos armados y con tolerancia religiosa y civil.
Ese proyecto tuvo el apoyo y la protección del general Urquiza, e incluso se llevó a cabo en tierras de su propiedad. Peyret entrevió que el experimento no progresaría si lo rodeaban grandes extensiones de latifundio, pobladas “por ganado y no por personas”, y no se privó de señalarle a Urquiza la necesidad de que se decidiera “entre la estancia y la colonia”.
(Más información en la edición gráfica de la revista ANALISIS, edición 1157, del día 19 de diciembre de 2024)