
El cartel con el rosto de Blanca Susana Sola, la niña desaparecida el 17 de marzo de 1990, se sumó a la lucha colectiva por la erradicación de la violencia machista en Gualeguaychú. Miguel, Alicia y Juan -junto a su compañera Liliana- se sumaron durante la siesta del lunes, a la cuarta edición de la convocatoria Ni Una Menos, que tuvo lugar frente a la Playa del Puente. Por primera vez en 29 años, los hermanos de la adolescente empuñaron un cartel con su fotografía y salieron a la calle para replicar en voz alta aquella pregunta que, como comunidad, no podemos volver a dejar de hacer: ¿Dónde está Blanca Susana Sola?
La negligencia y la burocracia judicial volvieron a desaparecer a Blanca Susana con el archivo y posterior expurgo de su causa original. Pero no pudieron más que demorar lo inevitable: porque esta tarde muchas otras personas que no conocían la historia, que no sabían de la desaparición de Blanca Susana, aprendieron su nombre y se apropiaron de la consigna que replicó a orillas del río Gualeguaychú: "¿Dónde está Blanca Susana?".
Hasta el momento nadie pudo explicar lo que, a las claras, resulta inexplicable: ¿Cómo fue que la búsqueda de Blanca Susana Sola pasara a formar parte de la pila de expedientes que en 2012 fueron a la hoguera para hacer espacio en Tribunales? Aquí también es donde nos preguntamos si esto mismo hubiese ocurrido con alguien que no fuera tan vulnerable en términos sociales como Blanca Susana: una niña pobre que no llegó a su casa.
En diálogo con <i>R2820</i> Miguel, Juan y Alicia -hermanos de Blanca Susana- hablaron sobre las expectativas en torno a la reconstrucción de la causa en manos del juez de Garantías, Ignacio Telenta, y sobre lo que significó para la familia el abandono del Estado durante estos 29 años.