Paz y amor en la era de la grieta

No es éste un tiempo de realizaciones para nadie que gobierne. El bienestar es una promesa a futuro. Se invoca para apaciguar las ansiedades, demorar las decepciones y mitigar las dificultades. Pero tanto el gobierno nacional como el de la provincia confían en que están sembrando. Las necesidades políticas del poder central permiten a Entre Ríos, por caso, arrancar concesiones que mejoren su perfil. El Ministerio de Economía se ilusiona con tres procesos simultáneos, todos derivados de una muy parcial recomposición del régimen federal: la devolución paulatina de la coparticipación, el prometido financiamiento nacional a la Caja de Jubilaciones y el endeudamiento que tomará a una tasa todavía indeterminada. Los acuerdos de mutua conveniencia diluyen por ahora la competencia partidaria. Como se insinúa desde hace tiempo, las relaciones de poder político se desplazan hacia los tribunales. Peronistas enemistados con Urribarri pero con llegada a Bordet motorizaron esta semana la primera de una serie de presentaciones que tienen como objetivo al Superior Tribunal. Acusaron al vocal Chiara Díaz de mal desempeño mientras preparan otros escritos que apuntan al corazón mismo del Poder Judicial.