La disputa entre el hermano y la viuda por una parte de la millonaria herencia de Ricardo Sáenz Valiente originó media docena de causas judiciales. El tradicional diario La Calle, con más de cinco décadas de influyente vida en Entre Ríos, vive su momento más aciago. Dos de sus más antiguos colaboradores entablaron un juicio millonario por el cual las propiedades de la Editora en Concepción del Uruguay están embargadas. Para colmo de males, ADEPA -entidad de la que El Rengo llegó a ser uno de sus vicepresidentes- cesó la membresía del diario por “confusión societaria”, a pedido de Juan Francisco. La preocupación de la viuda por la evolución de la disputa la llevó a recurrir a un aliado inesperado: José Licinio Scelzi, dueño de uno de los estudios jurídicos especializados en casos penales más cotizados del país. El flamante defensor de Viviana Sáenz Valiente está estrechamente relacionado con Concepción del Uruguay, pero además tiene una frondosa lista de clientes que llaman la atención: militares y ex militares represores, torturadores beneficiados por la obediencia debida, delincuentes económicos y hasta el viudo de María Marta García Belsunce. Ahora, además, será uno de los dueños del diario La Calle.