A propósito de que termina el año y teniendo en cuenta que el autor decidió no realizar un acto de presentación como es habitual ante la salida de un nuevo libro, vale entonces hacer un comentario sobre lo que dejó Herencia de familia. Crónica de un triple crimen, la última obra investigativa de Daniel Enz. Exactamente hace un año salía a la consideración de los lectores la primera edición. El director de este semanario puso una vez más la lupa sobre algún aspecto candente de la realidad. En nueve capítulos y un anexo documental, Enz recorre paso a paso el triple crimen perpetrado en noviembre de 2007 por el joven Matías contra su padre, Miguel Bressan (secretario de un Juzgado de Instrucción de Concordia), y cada uno de los integrantes de su familia. A los tres los asesinó a quemarropa; entre ellos, al pequeño hijo de apenas 2 años. Enz trata de explicar la trama oculta de una historia de poder, violencia y perversión en torno al caso sucedido en las cercanías de Concordia. La repercusión del libro fue inmediata, tal es así que rápidamente necesitó de la segunda edición. En sus páginas se puede deducir que el autor –ya dueño de un estilo propio- vuelve con un relato cristalino como el que tiene su primer libro, alternando la narración y el coloquio, una característica escritural que maneja muy bien. Sin embargo, esto no termina aquí. El aporte del libro parece ser más profundo aún, ya que desde un resonante caso policial que conmovió a la opinión pública entrerriana y nacional, desnudó los vericuetos –algunos más que oscuros- de cómo se fue estructurando el Poder Judicial en Entre Ríos a lo largo de las últimas seis décadas, partiendo de la caída del peronismo en septiembre de 1955 en adelante.