Aunque parezca mentira, nada indica en la justicia entrerriana que las dos causas más emblemáticas de los últimos tiempos, por graves hechos de corrupción, como la de los ATN de la fundación Aciser y la de los millones en el Uruguay del ex vicegobernador Domingo Daniel Rossi, convoque a juicio oral y público a sus imputados, antes de las elecciones de octubre. Los dos gruesos expedientes fueron elevados para el debate en el año 2003, pero el festival de apelaciones de sus abogados y la falta de firmeza judicial, derivaron en una vergonzosa desidia. A ello se sumaron las especulaciones políticas de magistrados y funcionarios, en pos de los ascensos en los escalones tribunalicios. En tanto, la Oficina Anticorrupción de la provincia, que está constituida como querellante en la causa que involucra al ex funcionario Oscar Mori y a la ex concejal de Paraná Liliana Morard (PJ), no movió un dedo para reclamar respuestas a la justicia, precisamente por las relaciones carnales de algunos de sus asesores con los imputados. Hace unos días, el abogado de Morard volvió a pedir la probation para su defendida, pese a que tal instancia ya había sido rechazada el año pasado, según confirmó ANALISIS.