“Leo” Acosta, el jugador del pueblo
Jugó en las inferiores de San Lorenzo pero se tuvo que volver porque su familia no lo podía mantener en Buenos Aires y trabajó en la verdulería con su papá mientras soñaba con ser futbolista. Cuando volvió a Universitario lo echaron de la primera práctica por “insoportable”. Cambió, se esforzó y armó una carrera deportiva tan única como extraña.



