La ética política según el almanaque

Todo logro, todo triunfo, todo éxito en definitiva, deben medirse no solamente por sus resultados prácticos en relación con las tácticas y las estrategias aplicadas, sino que, para poder convalidarse plenamente, deben estar legitimados por las armas utilizadas y el sentido ético del que estuvieron imbuidos sus ejecutores (sigue en el interior).